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¡Música rebelde!
Letra:
Ella apreciaba lo bello del mundo.
Me hablaba de versos y de arquitectura.
Recorrimos todo aquello juntos.
Su motor era amor y cultura.
Capaz de meter a este inculto en museos
contarme la historia de cada uno de ellos y abrirme los ojos, prestarme los suyos.
Primero me enamoré de ella y luego de la vida,
estuvimos llorando de felicidad.
Por Madrid caminando en las noches de invierno,
bajaba del bus, empezaba a llorar.
Mejores amigos y amantes, juramos estar incluso sin estar.
Por eso lo nuestro nos hizo inmortales. Empiezo a notarlo.
No soy invencible, sólo un pobre diablo.
Los amigos me abrazan y ladro.
Especulo y hablo del futuro con esta impotencia que a veces me trago.
Por eso acabo esperando un milagro.
Me despierto gritando del asco.
Otra puta semana sin rastro del viejo y te vas tú a buscarlo..
No entiendo mi suerte.
Tengo una pena que no me hace fuerte,
que me hunde y me acerca a la muerte.
Me susurra en la oreja jódete cabrón, a ver si pa’ la próxima aprendes.
Ella apreciaba lo bello del mundo.
Me hablaba de versos y de arquitectura.
Recorrimos todo aquello juntos.
Su motor era amor y cultura.
Capaz de meter a este inculto en museos
contarme la historia de cada uno de ellos.
Abrirme los ojos, prestarme los suyos.